La casa de mis abuelos. Orea

Aurora s/n

La otra casa que recuerdo como mía es la casa de mis abuelos en Orea.

En Orea las construcciones no tienen valor arquitectónico, la arquitectura de esta zona de Castilla es pobre, no hubo órdenes militares ni órdenes religiosas que hicieran grandes edificios.

En origen esta casa eran dos viviendas. Supongo que en origen mis abuelos tendrían una y después mis abuelos tuvieron la oportunidad e comprar otra y las unieron.
Es una casa que daba a dos calles, la entrada por la calle Aurora, que se conserva como entrada principal y por la que entrabas al primer piso y la otra por la calle Ancha por donde entrabas al portal, a las cuadras y tenías que subir.

Su fachada de piedra encalada. Pequeña ventanas. Puerta de madera que accede a la entrada del primer piso, a la vivienda familiar.

Entramos: tres o cuatro escalones de ladrillo rojo cocido.
A la izquierda salvando otro escalón entramos en dos habitaciones contiguas de paredes encaladas, techos de vigas, también encaladas, y suelos de cemento.

A la derecha, sin puerta ni pared hasta lo alto, la amplia cocina, con su suelo de ladrillo rojo, al frente las pilar bordeadas de ladrillo hechos a mano con cenefas, su chimenea, el vasar con sus cantareras, mesas de tres tamaños y su precioso banco de madera.

Mi recuerdo

Me gustaría contar las sensaciones que tengo en el recuerdo de las paredes, los muebles,…

Esta casa es muy difícil no unirla a los recuerdos de la infancia, a ese olor a humo que yo percibía nada más bajar del autobús, cuando llegaba de la ciudad. Olor a humo porque se guisaba con leña.

Y luego las vivencias y la libertad que el pueblo proporcionaba a unos niños que vivían en la ciudad. Mis abuelos vivían en la calle Aurora. Orea, a pesar de ser un pueblo de montaña tiene calles anchas y su trazado es amplio.

La calle Aurora empezaba en la carretera, donde paraba el autobús y terminaba en la última calle del pueblo en aquel momento, en la calle Ancha, en una pequeña replaceta.

La casa quisiera explicarla como era entonces. En origen fueron 2 viviendas y mantenía dos tejados. Una vertiente orientada al este bastante inclinada, con un ventanal en una pequeña pared.

La fachada tenía simplemente la puerta de entrada, una puerta que en origen sería la puerta de la cuadra de esa vivienda, que estaba cegada en su parte de abajo, con lo cual era como una gran ventana que daba a la cuadra.

Había también una ventana más bien pequeña que daba a un dormitorio, una ventana que daba luz a la cocina, una ventana en la parte superior que era la de la cámara, con su carrucha y una v pequeña ventana a ras de suelo que daba a las cuadras.

Si vamos a la fachada de la calle Ancha, no era una fachada muy grande. Estaba la puerta del portal, la típica puerta de la época con una parte fija. Era bastante ancha porque entraban el carro dentro del portal. Luego una puerta de estas que se partían, con la gatera y arriba una ventana no muy grande, más arriba una ventana que daba a la cámara y en un pequeño ángulo en la calle Ancha que daba a una replaceta en la pared, otra ventana.

La casa por dentro, el suelo y la escalera tenían ladrillo rojo recocido con unas pequeñas cenefas. El suelo de las habitaciones era de cemento, no así el de la cocina que era un ladrillo rectangular cocido.

En aquella época, cuando yo era pequeña, pocas viviendas tenían un enladrillado de terrazo o de mosaicos.

Subiendo por la escalera a la izquierda dos habitaciones, de una se pasaba a otra. Veo en mi recuerdo los escasos muebles, camas, sillas,… una mesa, una. Mi abuela las tenía cubiertas con hules, a veces con un mantón. Cuadros, cuadros de flores que después han estado en casa de mis padres. Un cuadro, bueno, una imagen religiosa, la Visión del perpetuo socorro. Esas imágenes que estaba Jesús andando sobre las aguas e imágenes similares.

2 comentarios sobre “La casa de mis abuelos. Orea”

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